
Prevén. Sabemos que cuando tienes una bolsa de piel nueva te mueres de ganas por utilizarla en ese momento ¡pero espera! Un poco de aerosol protector puede asistirte a prevenir daños irreversible, solo debes rociar un tanto sobre ella a una distancia de entre quince y 20 cm con movimientos circulares. Nunca de manera directa.
Mantén su forma. Si vas a guardar un bolso por bastante tiempo, rellénalo. Puedes hacerlo con prendas que prácticamente no emplees y no te importe que se arruguen o bien papel cebolla. Evita el diario o cualquier otro material que pueda despintarse y manchar el interior.
Cubre. Si no tienes una bolsa protectora en casa, vuelve a utilizar tus fundas para almohadas, éstas te ayudarán a sostener al polvo lejos de tu bolso.
No expongas. No importa si usarás tus carteras mañana o bien en un par de horas. Evita dejarla en donde les dé el sol y procura siempre y cuando estén en lugares secos, la humedad podría dañarla con seriedad.
Hidrata. Hazlo con tus bolsas de cuero dos veces por año. Puedes adquirir algún producto concreto para hacerlo o bien usar una simple crema humectante , solo cuida que no sea perfumada y que contenga el mínimo o bien nada de alcohol.
Evita accidentes. Es muy común que tus cosméticos se abran por sí solos dentro de tu bolsa y lo ensucien, no lo permitas guardándolos siempre y en toda circunstancia en una cosmetiquera o bien cualquier otra bolsa que se mantenga bien cerrada.
No abuses del peso. Usa siempre el bolso conveniente que pueda llevar todo cuanto precisas en tu día, poner más peso en tu bolsa de lo que puede cargar podría deformarla, dañar tus asas y hasta romperlas.
No aplastes. Como toda mujer que se respeta, es común tener un sinnúmero de bolsas amontonadas en los armarios. Trata de darle a cada una el espacio que merece con un perchero largo de los que se cuelgan en la pared, de este modo no se encimarán unas sobre otras.
Limpia. Pasa un trapo de algodón con un tanto de crema o cera natural tratándose de bolsas de cuero, en caso de las de charol un tanto de limpiador de vidrios funcionará de manera perfecta y en las de ante puedes comprar un cepillo singular con la que quitarás el polvo y vas a poder remover máculas.
Envuelve. Si tu bolso tiene asas de cuero recio, envuélvelas con harapos de algodón para mantenerlas flexibles, de lo contrario se podrían endurecerse y agrietar más fácilmente.
Actúa rápido. En caso de que tu bolsa sufra un percance y tenga una mancha, puedes removerla inmediatamente con toallitas anti-máculas, así que trata de llevar siempre y en todo momento un bulto contigo, recuerda frotar solo el área afectada o podrías dañar lo demás. Si notas que es una mácula de las difíciles, dejasela a los profesionales.
Zipper. Evita que el cierre pierda su función colocandoles un poco de cera natural en ocasiones, así siempre y en todo momento se sostendrá fluido. Abrirá y cerrará siempre que lo precises sin altercados.