
Uno de los principales problemas que conlleva el uso regular de la impresora está en los cabezales de la impresora. De hecho, la obstrucción de estos es común principalmente después de largos períodos de inactividad de la impresora. Es a partir de estos momentos que surgen varios problemas en el equipo.
Frente a ellos, algunos fabricantes han intentado solucionar estos problemas, disponiendo de varios modelos con sistemas de programa de autolimpieza. Sin embargo, los problemas de impresión tras largos periodos de inactividad son inevitables independientemente de la marca de nuestra impresora, por lo que conviene realizar un ejercicio de limpieza.
Comienza en la sección de herramientas de cualquier impresora, donde se desplegará un menú de posibilidades para solucionar el problema. En este caso, es importante tener claro que la función que tenemos que utilizar es la de disolver la tinta con tinta, porque lo que queremos es limpiar el cabezal solo si hay alguna zona tenue o blanco en su impresión, porque la limpieza consume tinta.
Esta acción es uno de los problemas que enfrentan los cabezales de impresión. Por tanto, el grado de consumo de tinta dependerá en gran medida del fabricante, del modelo de impresora que estemos utilizando y del tipo de limpieza que se realice en ese momento, ya que puede ser normal y minuciosa.
Sin embargo, aunque no tiene estadísticas detalladas de consumo de tinta para la limpieza de los cabezales de impresión, es posible que la impresora se quede sin cartuchos cuando se hayan realizado aproximadamente ocho limpiezas profundas.
Para evitar esta situación, es importante promover una serie de consejos de limpieza de los cabezales de impresión, realizar una impresión de prueba después de 20 minutos de inactividad y volver a intentarlo. Si no mejora, debe esperar al menos 24 horas para volver a realizar la limpieza de los cabezales.
Además, para evitar esta situación y los costes asociados a la limpieza de los cabezales de impresión, es importante realizar impresiones periódicas, en las que se utiliza el negro y los tres tonos base. Esta limpieza del cabezal debe realizarse como precaución para los cartuchos de tinta que se han instalado en la impresora durante menos de seis meses. Efectivamente, si la tinta no está en perfecto estado, es mejor optar por sustituir el cartucho y no realizar limpieza del cabezal, porque el problema se multiplicaría.